Si todavía no estamos cerca de los primeros 1.000 suscriptores de correo electrónico, en esta publicación de Ayuda Hosting, veremos cómo lograrlo.
Pareciera que no importa lo que hagamos, el tamaño de nuestra lista nunca cambia. Quizás todavía no tenemos suscriptores en absoluto. De cualquier manera, ese ascenso inicial a los 1.000 suscriptores puede sentirse dolorosamente lento, tal vez incluso hasta imposible.
La buena noticia es que existen algunas formas sencillas, pero no compartidas, de hacer crecer nuestra lista de correo electrónico que puede marcar la diferencia.
Pasos para obtener los primeros 1.000 suscriptores de correo electrónico
Los siguientes pasos que compartiremos pueden parecer simples. Sin embargo, no nos equivoquemos, son las claves para desbloquear el tipo exacto de crecimiento que hemos deseado.
Pero antes de entrar en eso, entendamos lo siguiente: si no comprendemos quién es nuestro cliente ideal, fracasaremos en el intento. Lamentablemente, para quienes no lo entiendan, esto es cierto.
A menos que entendamos íntimamente a nuestra audiencia, con qué están luchando y qué quieren, nunca veremos el crecimiento que deseamos de nuestro negocio. Menos aún, veremos una lista de 1.000 suscriptores de correo electrónico.
Así que, antes de seguir cualquiera de los pasos que mostraremos a continuación para obtener nuestros primeros 1.000 suscriptores de correo electrónico, primero tengamos claro cuál es nuestro cliente ideal.
Primer paso: Regla de las 10 personas
Una de las trampas donde caemos fácilmente cuando intentamos hacer crecer nuestra lista de correos electrónicos, es pensar en grande, demasiado rápido.
Tenemos que empezar poco a poco porque nuestra lista es pequeña en este momento. Tenemos que caminar antes de poder correr, en este tipo de cosas.
Ingresemos en la regla de las 10 personas. Esta estrategia proviene de Nathan Barry, fundador y CEO de ConvertKit.
Esto es lo que haremos:
Para comenzar, identifiquemos a 10 personas que sabemos que disfrutarían y se beneficiarían de nuestro contenido, de las informaciones que compartimos.
Puede tratarse de cualquiera: amigos, compañeros de trabajo, familiares, cualquiera con quien tengamos un hilo de conexión.
Lo único que importa es que el tema que seleccionemos sea relevante y útil para ellos. Luego, una vez que hayamos seleccionado esos 10 nombres, les enviamos por correo el tema que hemos seleccionado personalmente.
Y además, les hacemos estas tres preguntas:
- ¿Cuál es su mayor frustración al aprender sobre [aquí colocamos el nombre del tema]?
- ¿Qué sitios web, blogs o foros visita actualmente para conocer [aquí colocamos el nombre del tema]?
- Estoy comenzando un nuevo sitio para enseñar sobre [aquí colocamos el nombre del tema]. Me encantaría que seas uno de mis lectores beta. ¿Estás interesado?
Estas preguntas valen oro. Como hemos dicho antes, cuanto mejor conozcamos a nuestros clientes, más ganaremos su atención. Además, no hay mejor manera de lograrlo que haciéndoles este tipo de preguntas directas.
Incluso, podríamos considerar enviar las dos primeras preguntas por nuestra cuenta inicialmente. Después, si obtenemos respuestas detalladas, les hacemos la tercera pregunta.
Idealmente, saldremos de estas conversaciones con 10 nuevos suscriptores de correo electrónico. Además, una lista dónde se reúne nuestro público objetivo y nuestros próximos temas de publicaciones de blog.
Desde aquí, simplemente repetiremos la estrategia. A medida que ganemos nuevos suscriptores, podemos hacerles las mismas preguntas y obtener nuevos conjuntos de respuestas y sugerencias, lo que a su vez nos ayuda a crecer estratégicamente.
No podemos subestimar el poder que tiene el hacer esto. Existen personas que lo han llevado aún más lejos y han contactado a cientos (incluso miles) de personas en una semana. Les ayudó a aumentar sus listas de cero a hasta 1.200 personas. En solo una semana.
Realmente funciona. Si no quitamos nada más de esta publicación, solo debemos asegurarnos de hacerlo.
Segundo paso: Enseñar un tema específico
Los clientes de hoy son inteligentes y mucho más protectores de sus direcciones de correo electrónico de lo que solían ser. Esto es debido a que es información personal, algo que solo darán a alguien en quien confían y si creen que obtendrán valor del intercambio.
Es por eso que recomendamos evitar pedirle a la gente que se una a nuestro boletín.
Es demasiado vago y, a menudo, no presenta claramente ningún valor. De hecho, todo lo que hacemos es prometer que recibirán más correos electrónicos.
En cambio, podemos enseñarles algo. Ofrezcamos algo de valor, como un curso o guía.
Obtenga un curso gratuito sobre cómo escribir contenido excelente es mucho más poderoso que Únase a mi boletín informativo.
La gente quiere ayuda para resolver sus problemas, y si no reciben las suscripciones o ventas por correo electrónico que desearían, es probable que no entiendan cómo los ayudaremos a resolver sus problemas.
Cuando alguien quiere resolver su problema y nosotros le ofrecemos una solución, su resistencia se derrumba.
En lugar de rogarle a alguien que se registre, le rogaremos que ingrese (excepto que la puerta ya está abierta, por lo que nuestra lista seguirá creciendo y creciendo).
Si no estamos seguros de cómo implementar esto, a continuación, les mostramos un método probado y verdadero:
- Pensemos en nuestra audiencia. ¿Qué problema podrían estar experimentando ahora en su vida, relacionado con nuestro tema?
- ¿Podemos ayudarlos a resolver ese problema? Seguramente podemos hacerlo. Escribamos los pasos que ellos deben seguir. Podrían ser cinco o diez, no importa.
- A continuación, escribimos correos electrónicos en cada uno de esos pasos y los agrupamos como un curso de correo electrónico.
- Lo ofrecemos gratis en nuestro blog o sitio web, y configuramos los correos electrónicos como una secuencia de goteo después de que alguien se registre.
- Y listo. Acabamos de hacer un curso por correo electrónico.
Eso es todo lo que se requiere.
Puede parecer poco, pero ese ajuste puede significar la diferencia entre una lista de correos electrónicos a punto de explotar (y dinero en el banco, si estamos vendiendo algo) y un pueblo fantasma digital.
Tercer paso: Construir relaciones
Cuando estemos creando nuestra lista de correo electrónico, no debemos olvidar que no es solo una lista.
Hay personas reales detrás de esas direcciones de correo electrónico. Personas reales que leen nuestro blog y eligen registrarse. No aumentemos ciegamente nuestra lista solo por los números y nuestro ego.
Una lista masiva llena de personas equivocadas no solo es inútil, es frustrante y costosa. No obtendremos resultados. Nuestros correos electrónicos no se abrirán. Nuestro negocio no crecerá.
La mentalidad de crecimiento a toda costa lleva a los grandes dueños de negocios a recurrir a trucos ingeniosos para construir listas.
En cambio, debemos concentrarnos en nuestra audiencia. Si nos enfocamos en servir, dar valor y resolver sus problemas, creceremos más rápido de lo que podremos imaginarnos.
Solo debemos seguir apareciendo (y enviar un correo electrónico a esos 10 amigos).
Para finalizar
¿Podemos pensar en 10 personas a las que podríamos contactar en este momento?
¿Tenemos un curso en mente para reemplazar el botón unirse a mi boletín informativo?
¿Cuáles son sus mayores dificultades para construir nuestra lista de correo electrónico?
Esperamos que este artículo sobre algunos pasos para obtener los primeros 1.000 suscriptores de correo electrónico, les haya resultado útil. Más información sobre este y otros temas en Ayuda Hosting.
